Esta preocupación es el tema central del Informe Naranja sobre Tendencias Clave de los Españoles ante la Jubilación, presentado por ING. El estudio compara las tendencias de ahorro, las perspectivas y la percepción de las pensiones tanto en la población general como en los jóvenes de entre 25 y 37 años.
¿Cómo ahorran los Millennials?
El informe revela que el 80% de los millennials tiene ahorros y que un 61% asegura que podría ahorrar más. En la población en general, un 70% cuenta con un fondo de emergencia y un 50% cree que aún podría aumentarlo. Sin embargo, entre los jóvenes hay más preocupación por el futuro de las pensiones:
el 86% de los millennials considera que las pensiones públicas no serán suficientes para su jubilación, mientras que en la población general este porcentaje es del 80%.
A pesar de esta inquietud, solo un 18% de los millennials ha empezado a planificar su jubilación o a tomar medidas para mejorar su patrimonio a largo plazo. Aunque tienden a ahorrar más que otras generaciones, sus ahorros suelen destinarse a objetivos de consumo a corto o medio plazo, como comprar una casa, un coche o financiar un viaje, en lugar de ser un ahorro específico para la jubilación. Según Gloria Siso, responsable de inversión digital de ING España, muchos millennials consideran que aún son “demasiado jóvenes para planificar su jubilación”, repitiendo así los errores de generaciones anteriores. Aunque son una de las generaciones más preparadas, su cultura financiera sigue siendo limitada.
El informe también indica que un 67% de los millennials prefiere cuentas y depósitos para sus ahorros, opciones que se ven afectadas negativamente por la inflación. Solo el 40% opta por planes de pensiones u otros productos de inversión a largo plazo, tendencia similar en la población general.
¿Es este un ahorro real?
Domingo Soriano, periodista económico, subraya que aunque los millennials ahorran, en muchos casos este ahorro está destinado a objetivos de consumo específicos. “No es un ahorro real en el sentido de construir un patrimonio para toda la vida”, afirma Soriano, quien advierte que el ahorro de los jóvenes debería enfocarse más en asegurar su estabilidad financiera a largo plazo.
El futuro del sistema de pensiones: ¿Qué cambios se esperan?
Durante la presentación del informe, expertos discutieron sobre el futuro del sistema público de pensiones. Aunque no se da por terminado, se reconoce que el sistema enfrentará cambios importantes. Soriano destaca que es posible que el sistema público sobreviva, pero que su capacidad para mantener el poder adquisitivo actual se verá reducida. Esto se debe al incremento en la proporción de pensionistas en relación con los trabajadores y a que España ya tiene cotizaciones sociales relativamente altas en comparación con otros países.
Ángel Martínez-Aldama, presidente de Inverco, señala que “la única manera de afrontar el futuro de las pensiones es elevar las cotizaciones, reducir las pensiones (como se propuso en la reforma de 2013), e informar a los ciudadanos sobre su pensión estimada futura”. Además, Martínez-Aldama subraya la necesidad de que el Estado facilite mecanismos para incentivar los planes privados de pensiones y hacer sostenible el sistema público.
Por su parte, el emprendedor e inversor Dimitri Uralov considera que la responsabilidad individual será clave en el futuro. Uralov destaca que las personas tendrán que estar dispuestas a trabajar más años, actualizar sus habilidades y mantenerse activas laboralmente conforme envejecen. También sostiene que “la manera más fácil de asegurarte tu jubilación es montar una empresa”, aunque no deja de recalcar la importancia de empezar a ahorrar cuanto antes.
La necesidad de reformas consensuadas
Con la generación del “baby boom” acercándose a la jubilación, Martínez-Aldama advierte que el sistema de pensiones enfrentará desafíos en los próximos 5 a 20 años. Según él, las reformas deberán ser más profundas y urgentes entre 2025 y 2035, y anima a los responsables políticos a buscar acuerdos que permitan asegurar el futuro del sistema de pensiones.
El presidente de Inverco es claro al afirmar que “la generación que pagará el pato es la que financia las pensiones de sus padres y no tiene la certeza de que sus hijos hagan lo mismo”. A su juicio, el sistema público de pensiones evolucionará hacia un modelo en el que se priorice una pensión mínima más alta y una pensión máxima más baja.
¿Qué significa esto para los millennials?
Para los millennials, este escenario implica la necesidad de un cambio en sus hábitos financieros. Aunque el sistema público de pensiones seguirá existiendo, es probable que no cubra todas sus necesidades en el futuro. Por lo tanto, esta generación necesita empezar a ahorrar para la jubilación cuanto antes, explorar alternativas de inversión y mejorar su educación financiera.
Además, es importante que comprendan que planificar la jubilación no significa renunciar a objetivos de consumo actuales, sino asegurarse de que, en el futuro, podrán mantener una buena calidad de vida sin depender exclusivamente de una pensión pública. Las decisiones que tomen hoy sobre sus finanzas tendrán un impacto directo en su estabilidad y bienestar en la jubilación.
En conclusión, la falta de confianza de los millennials en el sistema de pensiones refleja una tendencia clara y justificada. Sin embargo, es crucial que esta desconfianza se traduzca en acciones concretas, como el ahorro a largo plazo y la diversificación de los recursos financieros.